Un proceso histórico para la conservación de los mamíferos de Argentina

Un proceso histórico para la conservación de los mamíferos de Argentina

Alouatta caraya. Foto: Graciela Tejeda Boglic

Alouatta caraya. Foto: Graciela Tejeda Boglic

 

Dr. Javier A. Pereira
Presidente de la Sociedad Argentina para el Estudio de los Mamíferos

 

La Crisis de Extinción es un hecho tan palpable como preocupante, y la biodiversidad global enfrenta por estos días un abanico de potentes amenazas derivado de las actividades humanas. El informe 2019 de la Plataforma Intergubernamental de Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos (IPBES) refleja este proceso de forma alarmante: cerca de un millón de especies animales y vegetales corren riesgo de desaparecer en las próximas décadas. Este escenario es, entonces, fundamental para valorar el trabajo que aquí se presenta.

La categorización 2019 de los Mamíferos de Argentina según su riesgo de extinción constituye un diagnóstico oportuno para ubicar al país en el contexto regional y global, identificar políticas públicas necesarias para afrontar las amenazas detectadas, optimizar la planificación de estrategias de conservación, determinar vacíos de información que requieran del abordaje científico, o incluso despertar el interés de la ciudadanía por los mamíferos, en general muy poco conocidos y menos aún valorados.

Pero más allá del valor intrínseco que tiene la información contenida en esta web, la singularidad del proceso que condujo a ella también debe ser reconocida, porque allí radica una de sus grandes fortalezas. Es la primera vez que la Sociedad Argentina para el Estudio de los Mamíferos (SAREM) y la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación (SAyDS) abordan en forma conjunta el desafío de categorizar a todos los mamíferos del país. Y para que este trabajo tenga también impacto en términos de gestión, el proceso fue pensado para trasladar los resultados a categorías oficiales de conservación para las especies a nivel nacional. Un segundo lineamiento estratégico definido para este proceso pone la rueda en marcha; los resultados se presentan en un sitio web de acceso libre y gratuito, pensado para ser actualizado en forma periódica. Esto implica que el producto aquí obtenido no representa el fin del proceso, sino la piedra fundamental de un programa de monitoreo en el tiempo para evaluar la evolución del estado de conservación de la rica diversidad de mamíferos de nuestro territorio.

El mecanismo de trabajo diseñado y articulado en este proceso apuntó siempre a la amplia participación, buscando complementar el aporte del sector científico con el de los organismos de gestión y las organizaciones ambientalistas. Para la SAREM en particular este ha sido un proceso histórico, alcanzándose un grado de participación superlativa por parte de sus socios. Pero también ha sido nutrido el aporte realizado desde otros estamentos, y los números así lo advierten: la categorización 2019 incrementó en más de cinco veces el nivel de participación con respecto a la realizada en 2012, involucrando a casi 400 expertos y referentes. Mejor aún, el número puede casi duplicarse si se considera también la contribución de los más de 300 fotógrafos que le «pusieron cara» a casi todas las especies, gracias a un esfuerzo compartido con la Asociación Argentina de Fotógrafos de Naturaleza (AFONA). Todas estas visiones, ensambladas mediante el uso de una estructura metodológica robusta y estandarizada, hacen del producto final el documento de consenso más completo y actualizado que existe sobre los mamíferos del país.

Para revertir las predicciones emanadas del informe 2019 de IPBES es necesario repensar la manera en que los seres humanos nos relacionamos con nuestro planeta. Más que nunca es necesario buscar alternativas de desarrollo que aseguren el mantenimiento de la biodiversidad, de los procesos naturales y de los servicios ecosistémicos de los que la propia humanidad se nutre. Así, el producto que aquí se presenta constituye una línea de base vital para evaluar nuestra capacidad de reaccionar como especie. La Argentina tiene hoy el 24% de las especies de mamíferos bajo amenaza de extinción; la próxima categorización nos mostrará para qué estamos.